Científicos de Londres dicen haber descubierto un mecanismo para comprender por qué algunas personas se convierten en psicópatas.
El estudio, realizado en pacientes psiquiátricos, concluye que esta patología se debe a que existe una comunicación imprevisible entre dos partes del cerebro.
Julian Siddle, periodista de ciencia de la BBC, explica que el detonante del comportamiento psicópata es una comunicación defectuosa entre la parte del cerebro relacionada a las emociones, el miedo y la agresividad y otra parte encargada de la toma de decisiones.
El Dr. Michael Craig, del Instituto de Psiquiatría del King’s College de Londres, quien dirigió el estudio, dijo a la BBC que la interferencia entre estas dos partes del cerebro es comparable a transitar por una carretera en mal estado.
«Las conexiones en el cerebro del psicópata, o las ‘carreteras’, no están tan bien construidas como las de una persona que no lo es. Es como si la ‘carretera’ del psicópata tuviera más baches y estuviera peor mantenida que la de una persona que no padece la psicopatía».
Craig dice que ese trastorno por sí solo no basta para diagnosticar la psicopatía, pues puede tratarse de otro desorden psíquico, pero contribuye a explicarlo.
El resultado final es, entonces, que esta característica del cerebro no es necesariamente producto de una psicopatía sino de un fenómeno que se presenta en los psicópatas y no en las personas que no padecen esta enfermedad.
Los científicos del King’s College observaron la actividad cerebral de nueve pacientes psiquiátricos que cumplían condenas por delitos como violaciones u homicidios.
Aunque se trata de un estudio pequeño, esto podría tener implicaciones relacionadas a la toma de decisiones en el sistema de justicia penal, especialmente a la hora de estudiar si un criminal puede reincidir.
Fuente: BBC MUNDO
Cataluña será, a partir de septiembre, la primera comunidad autónoma que suministra inhibidores sexuales a los violadores con riesgo de reincidencia. La Generalitat empezará a recetar el tratamiento -la mal llamada castración química- a los condenados por delitos sexuales que estén a punto de abandonar la cárcel y corran el riesgo de cometer nuevas agresiones. La medida será voluntaria: sólo la adoptarán los presos que lo deseen. Su alcance será, además, muy limitado. La consejera de Justicia, Montserrat Tura, cree que si sólo tres presos siguen el tratamiento el primer año será «todo un éxito».
La castración química -expresión que la mayoría de expertos rechaza- es, en realidad, un tratamiento hormonal que disminuye la producción de testosterona. De esa forma, decae también el deseo sexual del violador, que pasa a comportarse de forma más dócil. Pero la inyección, por sí sola, no es la panacea. La Generalitat la entiende como un complemento más de los programas de tratamiento que ya siguen más de medio millar de reos en los centros penitenciarios españoles.
El Departamento de Justicia del Gobierno catalán está ultimando el protocolo que detalla cómo se aplicará la polémica iniciativa. La idea es que los terapeutas informen a los presos que respondan a un perfil determinado sobre la posibilidad de iniciar el tratamiento.
Pero, ¿quiénes reúnen los requisitos? Sólo un puñado de hombres, según Justicia. En España hay más de 3.600 reclusos condenados por delitos sexuales. En Cataluña, apenas 230 de ellos participan en programas de rehabilitación y se encuentran, por lo tanto, en la última fase de su condena. Es en ese periodo -cuando los presos empiezan a disfrutar de permisos o ven cerca la salida a la calle- cuando se deben suministrar los inhibidores. Pero la selección debe restringirse a un grupo aún más reducido: el de los violadores reincidentes. Y según un reciente estudio de la Generalitat, un 5,5% de los violadores vuelven a cometer agresiones cuando quedan libres. El resultado es que, este año, sólo unos 15 presos son susceptibles de ser tratados con inhibidores. Y entre éstos aún hay que eliminar a los que no quieran participar.
«La castración química tiene que ser voluntaria; si no, no sirve de nada», según fuentes de Servicios Penitenciarios. La razón es que, además de que el tratamiento se complementa con apoyo psicológico, es reversible. Es decir, que sus efectos duran sólo mientras el preso acude a inyectarse o a recibir los fármacos que precise. El efecto de la inyección es más largo (sólo hay que acudir una vez al mes) y es, por ello, el método más utilizado. Una vez que el reo cumple condena y abandona la cárcel, sólo su fuerza de voluntad puede hacerle regresar.
Odette Terol, doctora en psicología clínica y forense, comparte ese planteamiento. Terol ha tratado a cientos de agresores sexuales en Estados Unidos, donde los inhibidores de la libido funcionan desde hace 13 años en programas de libertad condicional. La experta recuerda que, aunque muchas pruebas científicas han resultado exitosas, el tratamiento hormonal no es infalible: algunos violadores han vuelto a reincidir incluso con los órganos sexuales extirpados.
«He tratado a pacientes castrados y a veces no ha funcionado», argumenta Terol. Según la doctora, algunos presos abandonaron el tratamiento por temor a los efectos secundarios que pueden originar los fármacos: «Crecimiento de las mamas, caída del vello, depresión, obesidad…», detalla. «Algunos acudían sólo para obtener beneficios en la cárcel. Pero, a escondidas, se inyectaban testosterona», recuerda.
En el caso de Cataluña, sin embargo, no habrá beneficios penitenciarios para los que accedan al tratamiento de inhibición del deseo sexual. Tampoco se castigará a los que se nieguen. En las cárceles, el hecho de no participar en los programas de tratamiento sí implica la redacción de informes desfavorables que pueden ser clave a la hora de obtener permisos penitenciarios. «El beneficio es personal: si se someten al tratamiento, es posible que no reincidan y no hagan daño a más gente», sostienen fuentes del departamento.
La medida fue acordada hace un año por una comisión de expertos presidida por el ex fiscal José María Mena. La comisión acordó una batería de iniciativas para tratar de minimizar los riesgos de la excarcelación de violadores reincidentes tras cumplir condena.
Tras el caso de la niña Mari Luz, el Gobierno central también se pronunció a favor de aplicar inhibidores sexuales, aunque hasta hora no ha concretado cómo hacerlo. En países como Estados Unidos, Alemania, Dinamarca o Suecia, funciona ya desde hace años.
Fuente: [Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE]
Un tribunal de Estados Unidos encontró culpable a Dale Neumann de la muerte de su hija de once años, enferma de diabetes, quien falleció en el suelo de su casa mientras sus padres rezaban con un grupo de personas por su recuperación, en vez de llevarla al hospital.
Neumann, de 47 años, quien en el pasado estudió para ser pastor de la iglesia evangélica pentecostal, dijo ante el tribunal que nunca pensó que su hija moriría porque estaba seguro de que Dios curaría a su hija.
La pequeña Madeline murió en su casa de Wisconsin (norte de EE.UU.) a causa de una diabetes no diagnosticada, que según indicaron varios médicos durante el juicio hubiera tenido cura con la atención adecuada.
La fiscalía alegó que sus progenitores deberían haberla llevado urgentemente al hospital, puesto que la niña no podía andar, hablar, comer o beber.
Noticias completa en: Noticias Religiones. Hechos que muestran la irracionalidad de las religiones
El secretario general de las Naciones Unidas dijo este viernes que estaba considerando el nombramiento de un alto funcionario para encabezar la lucha contra la violencia sexual y urgió a la asamblea general a crear un organismo dedicado a los derechos de la mujer.
«A pesar de algunos progresos en las últimas dos décadas, la (…) violencia sexual continúa sobre bases extensas y sistemáticas», dijo Ban Ki-moon ante el Consejo de Seguridad durante un debate sobre «Mujeres, paz y seguridad».
El debate se convocó para discutir la implementación de una resolución del Consejo aprobada el año pasado y que elevaba la violación y la violencia sexual al estatus de crímenes de guerra cuando fueran cometidas como parte de un plan sistemático.
Ban destacó los actuales conflictos en Chad, República Democrática del Congo (RDC) y Sudán como áreas en las que se recurre rutinariamente a la violación como arma de guerra.
Sólo en la RDC fueron violadas 3500 mujeres en lo que va del año, según un informe de la ONU.
Fuente: UNIVISION.COM
________________
Enlaces relacionados:
– La violencia de género sólo es del hombre sobre la mujer
– Dos de cada diez mujeres maltratadas en Murcia no impulsan la condena de su agresor
En el mes de julio se cumplieron 99 años del nacimiento de Robert King Merton, uno de los clásicos de la escuela estadounidense de sociología, quien pensaba que «la ciencia hace del escepticismo una virtud».
Muchas frases acuñadas por él son aún utilizadas habitualmente, tanto dentro como fuera de ese campo. Su libro The Normative Structure of Science, editado en 1942, introduce cuatro conceptos que consideró guías para la correcta actividad científica, conocidos actualmente como Normas Mertonianas.
Estas han ido ganando terreno en la comunidad científica como una forma de resumir lo que debe considerarse como «buena ciencia». Sus principios guías son los siguientes: comunalismo, universalismo, desinterés y escepticismo organizado.
Comunalismo significa que los resultados científicos deben ser propiedad común de toda la colectividad científica.
Universalismo, que cualquier científico debe tener la posibilidad de contribuir a la ciencia sin importar raza, nacionalidad, cultura o sexo.
Desinterés se refiere a que no se deben presentar resultados enlazándolos a creencias personales o al activismo por una causa. Las simpatías deben mantenerse separadas de los resultados científicos.
Finalmente, escepticismo organizado significa que cualquier alegato o resultado científico debe ser expuesto al escrutinio crítico antes de ser reconocido como válido.
El escepticismo organizado se parece mucho, pero no es lo mismo, que el escepticismo racional, corriente filosófica que cuestiona la veracidad de afirmaciones que carecen de suficiente evidencia empírica.
Este cuestionamiento no se refiere a las discusiones habituales entre científicos; surge cuando se examinan supuestos resultados o teorías que van en contra de lo usualmente reconocido por la comunidad científica.
Las críticas más frecuentes de los escépticos racionales incluyen a los psíquicos, parasicólogos, astrólogos y homeópatas, las cartas del tarot, las abducciones alienígenas y las percepciones extrasensoriales, aunque las modalidades pueden variar bastante de país a país.
En ocasiones se incluyen las curas milagrosas y algunos dogmas religiosos. Tales creencias son calificadas por los escépticos como pseudociencia.
NOTABLES ESCÉPTICOS
Hay quienes consideran el escepticismo como algo negativo; sin embargo, la historia recoge un sin fin de escépticos notables.
René Descartes, filósofo y matemático francés del siglo XVII, consideraba que…»para investigar la verdad es preciso dudar, en cuanto sea posible, de todas las cosas». Dudar de todo era el lema preferido de Carlos Marx, e incluso en la religión católica han existido escépticos notorios como Tomás el apóstol.
El premio Nóbel Richard P. Feynman, considerado por muchos el padre de la Electrodinámica Cuántica, escribió lo siguiente: «El científico posee mucha experiencia sobre la ignorancia, la duda y la incertidumbre… Cuando un científico no conoce la respuesta a un problema, es ignorante».
«Cuando tiene nociones acerca de lo que puede ser la respuesta y está indeciso, eso es incertidumbre. Y aún cuando está condenadamente seguro de un resultado, en realidad tiene dudas. Hemos encontrado de primordial importancia que, para progresar, debemos reconocer la ignorancia y dejar espacio para la duda».
«El conocimiento científico es un conjunto de afirmaciones con grados variables de certeza -algunas son muy poco confiables, otras bastante confiables, ninguna absolutamente definitiva» (1).
De ahí que, por extraño o absurdo que nuevos fenómenos o hipótesis puedan parecer, el escepticismo en la ciencia no predica que se rechacen automáticamente; sólo sostiene que deben ser sometidos a la crítica y estar debidamente fundamentados antes de ser aceptados como verdaderos.
Sin embargo, es común que quienes critican el escepticismo tergiversen la realidad, acusando a los escépticos de sus propias faltas.
Como desean que sus propuestas -que consideran verdades absolutas- sean aceptadas por todos sin mostrar suficientes evidencias, alegan que son los escépticos quienes se dedican sistemáticamente a negar sus afirmaciones sin aportar pruebas.
¿Y -preguntamos nosotros- cómo demostrar que no existe lo que es sólo fantasía?
Imagine el lector lo que ocurriría si en un tribunal de grados científicos no fuera el doctorando quien debiera convencer al tribunal de la veracidad de sus afirmaciones, sino al revés.
Es decir, que fueran los miembros del tribunal quienes tuvieran que demostrar la imposibilidad de alguna afirmación ilusoria para impedir que el doctorando aprobara su tesis.
Por ejemplo, consideremos los argumentos de un imaginario tribunal tratando de demostrar la falsedad de la siguiente afirmación: «A los marcianos les gusta el helado de chocolate».
– Tribunal: Falso. No hay marcianos.
– Doctorando: Demuéstrelo.
– Tribunal: No hay oxígeno en Marte y así no es posible la vida.
– Doctorando: Los marcianos podrían vivir en cuevas herméticas del subsuelo donde sí hay oxígeno. Y podrían respirar otra cosa, e incluso no respirar. No está demostrado que los marcianos no estén ahí. No está demostrado que no hay oxígeno en el subsuelo… Y así hasta el infinito.
Ante cada nuevo argumento, siempre aparecerá una nueva propuesta cuya falsedad es prácticamente indemostrable. No importa que el tribunal logre, con mucho esfuerzo, demostrar categóricamente la falsedad de una afirmación particular. Inmediatamente surgirán otras muchas propuestas igualmente indemostrables.
Lo anterior es consecuencia de seguir una línea de pensamiento opuesta a la lógica, donde se invierte lo que en idioma inglés se denomina «the burden of proof», que puede traducirse como «la responsabilidad de la demostración».
Tal responsabilidad es siempre de quien propone lo novedoso, no de quien lo juzga o critica, aunque los amantes de la pseudociencia insistan en afirmar lo contrario, y se empecinen en llamar ciencia a sus no demostradas creencias.
Autor: Arnaldo González Arias, Doctor en Ciencias Físicas. Facultad de Física de la Universidad de La Habana (Cuba).
(1) The role of doubt in science; http://laserstars.org/bio/Feynman.html
Fuente: Prensa Latina
_________________
Enlaces relacionados:
La revista estadounidense Business Insider ha elaborado un polémico ranking en el que alista el TOP 10 de estafadores vinculados a las inversiones.
Estos diez ejecutivos, han sido jusgados por la justicia y condenados por cometer grandes fraudes. A continuación, les ofrecemos este listado de “indeseables”
TOP 10
1. Bernard Madoff: condenado a 150 años de cárcel por una estafa de 65.000 millones de dólares. El rey de la estafa en Wall Street.
2. Bernard Ebbers: ex presidente de WorldCom recibió una condena a 25 años de cárcel en 2005 por uno de los fraudes más grandes en los EEUU: 11.000 millones de dólares.
3. Jeffrey Skilling: ex presidente ejecutivo de Enron, fue condenado en 2006 a 24 años de cárcel por fraude y conspiración por la quiebra del gigante de la energía. Recibió 19 cargos, entre ellos, fraude y complot, y podría haber sido condenado a 185 años. En mayo pasado apeló la sentencia.
4. John Rigas: fundador de la tecnológica Adelphia llevó a la bancarrota a su empresa con un multimillonario fraude. Desde 2007 cumple una condena de 13 años de prisión junto a su hijo Tim (condenado a 20 años). Por el delicado estado de su salud podría salir.
5. Joseph Nacchio: Ex CEO de Qwest, fue sentenciado a seis años de prisión por tráfico de información privilegiada.
6. Richard Scrushy: ex ejecutivo de HealthSouth fue condenado a cerca de 7 años de cárcel por soborno y al pago de 2.900 millones de dólares por un caso civil que iniciaron los accionistas.
7. Randall “Duke” Cunningham: ex representante republicano por California fue condenado a ocho años por fraude, evasión de impuestos por importe de un millón de dólares y por aceptar sobornos por al menos 2,4 millones de dólares para promover nuevos contratos del departamento de Defensa.
8. Andrew Fastow: ex CEO de Enron, condenado a seis años de prisión por conspiración después de cometer fraude con títulos bursátiles. Su sentencia se redujo de diez a seis años después de que testificara en contra de algunos de sus ex compañeros como Jeff Skilling.
9. Jack Abramoff: lobbista republicano. Deberá permanecer entre rejas hasta abril de 2011 por defraudar a indígenas americanos (sus clientes).
10. Edwin Edwards: Ex gobernador de Luisiana, usó su cargo para vender de manera fraudulenta licencias de casinos.
Fuente: Finanzza$.com
Bajo licencia Creative Commons