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La web de Maco048. Criminología
Las mentes simples casi siempre yerran en sus juicios
La intensidad de los milagros disminuye con el tiempo
Una de las características de los fenómenos paranormales es que su intensidad decrece con el tiempo. Ésta es una de las muchas ideas que aparecen en el libro de Henri Broch y Georges Charpak Devenez sorciers, devenez savants, publicado en castellano comoConviértase en brujo, conviértase en sabio en el año 2003. Para ilustrar esta afirmación, los autores se centran en el caso de la telequinesia, el poder de desplazar objetos a distancia solo con la concentración mental. Hacia el año 1850, sus practicantes eran capaces de mover mesas pesadas, de un centenar de kilos. Unas décadas más tarde, ya solo eran capaces de mover cacerolas y utensilios de cocina. Hacia 1970 podían mover objetos pequeños, como piezas de ajedrez. Y, a principios del siglo XXI, con un gran esfuerzo de concentración, logran mover trozos de papel, de un peso de un gramo. Así que, en poco más de ciento cincuenta años, a media que los mecanismos de control se han hecho más precisos, la intensidad de la telequinesis ha disminuido en un factor cien mil.
Cuando leí este libro hace unos años, me vino a la cabeza uno de los más celebrados milagros de San Vicente Ferrer. De estudiante en Barcelona le prohibieron hacer milagros. En una de sus idas y venidas por la ciudad, un albañil cayó de un andamio y gritó socorro, y el santo detuvo su caída, dejándolo suspendido en el aire. Fue entonces a pedir permiso para poder realizar el milagro, permiso que le fue concedido. Y volvió e hizo descender al albañil, que salvó su vida. En el proceso de canonización de San Vicente constan ochocientos sesenta milagros. Ferrán Escoda, en la reseña que publicó en El País del libro de Joan Francesc Mira San Vicente Ferrer, vida y leyenda de un predicador, señala que ningún otro santo le supera en capacidad milagrosa y añade, con razón, que “no parece que vaya a perder el puesto porque los tiempos actuales son puntillosamente científicos, y la Iglesia ya no santifica con aquella alegría”.
Entro en la página web de una empresa que produce productos homeopáticos. Voy al apartado en el que comentan las afecciones que pueden tratar: afonía, alergia, dolor de cabeza, estrés, gripe, hemorroides, mareos, problemas de piel, tos… Teniendo en cuenta la fiereza con la que sus creyentes atacan a la medicina alopática, esperaba otra cosa: cáncer, cólera, diabetes tipo I, difteria, ébola, hepatitis, malaria, meningitis, poliomielitis, sarampión, sida, tifus, tuberculosis, varicela… Y me pregunto si, con el tiempo, no habrá disminuido el número y la gravedad de las afecciones tratables con la homeopatía.
Fuente: Piratas de la ciencia. BLOG
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Mala ciencia en la muerte de las abejas
En una alarmista nota sobre la muerte de las abejas, el periodista de Semana (Colombia) metió una cuña antitransgénica ya desechada:
La otra hipótesis, que se basa en estudios publicados el año pasado en la prestigiosa revista Science, sugiere que al ingerir el polen de las flores que producen las plantas transgénicas las abejas consumen la proteína Bt, una sustancia que con el tiempo las lleva a desarrollar lo que se ha llamado el Síndrome de Deficiencia Cognocitiva de Camino, que hace que pierdan la orientación y terminen muriendo por no ser capaces de regresar a sus colmenas.
De hecho, esta hipótesis, estuvo de moda hace seis años, no uno, y se abandonó porque después de hacer estudios, no hay evidencia que la apoye. No hay estudios en Science que apoyen esto.
La hipótesis de los neonicotinoides, por el contrario, sí ha sido publicada en Science, aunque parece ser que esta es una formulación más ideológica que científica.
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Demostración científica de la maldad de la homosexualidad o el colmo del absurdo de la ciencia religiosa
Si ya es inadmisible que los intolerantes de siempre defiendan sus prehistóricas y antidemocráticas creencias basándose en el argumento de que una entidad todopoderosa e omnisciente le reveló al profeta iletrado de turno que tal o cual comportamiento es pecado, el colmo de estupidez es cuando esos mismos sectarios utilizan la ciencia para justificar los divinos dictados. Y por supuesto ni siquiera aquí los científicos (sobre todo si son creyentes) parecen estar al margen de esta risible aunque discriminadora forma de entender la ciencia.
Si no juzguen ustedes. El HuffPost informa que un estudiante de postgrado nigeriano que incluso ha ganado un premio para jóvenes científicos en su país, se propuso estudiar científicamente a la homosexualidad. Así nuestro piadoso científico observó con compasiva inquietud el incremento de naciones occidentales en donde se está legalizando el matrimonio homosexual y viendo que Dios le había dado la sabiduría para ser científico, se propuso usar la ciencia para probar el matrimonio gay era malo. Mal empezamos con semejante hipótesis de trabajo, pero bueno dejemos a nuestro brillante científico creyente que nos ilumine. Así que ni corto ni perezoso hizo multitud de experimentos tanto de física, como de química y biología además de utilizar las matemáticas para demostrar la maldad del matrimonio homosexual. En una entrevista a un periódico local, él mismo nos detalla los experimentos.
En física, primero comprobó que los imanes se orientan hacia polos magnéticos de tal forma que cuando acercaba dos imanes entre sí se repelían por los polos iguales y se atraían por los contrarios. Y de ahí extrajo esta reveladora y como verán tan “científicamente” correcta conclusión:
“como dos Polo Norte de dos imanes se repelen, esto muestra que un hombre no debe sentirse atraído por otro hombre, lo que indica que el matrimonio del mismosexo no se debería celebrar. Una mujer no debe tampoco atraer a otra mujer como el Polo Sur de un imán no atrae al Polo Sur de otro imán. Sin embargo,cuando usted acerca un Polo Norte de un imán y un Polo Sur de otro imán seatraen porque no son lo mismo, lo que indica que un hombre va a atraer a una mujer por la forma en que la naturaleza ha hecho a la mujer”
Así que ya saben cómo los hombres somos Polo Norte y las mujeres Sur, pues ya tenemos la explicación científica basada en la física de la imposibilidad de la homosexualidad. Pero si esta increíble demostración nos le satisface, no se preocupen que nuestro esforzado investigador ha hecho más experimentos, ahora en el campo de la Química. Así usando diversas reacciones químicas agua nuestro infatigable científico llegó a la conclusión que
“los hombres no reaccionaban con los hombres y que las mujeres tampoco lo hacían entre sí”
Anonadado quedo. No sólo somos polos magnéticos sino que ahora también las relaciones sexuales se asemejan a las reacciones químicas. Pero no se vayan que todavía hay más. Desde el punto de vista biológico, se fue al zoológico y encontró que los animales mantenían siempre relaciones sexuales entre diferentes sexos y cómo no encontró ningún animal homosexual (se ve que el pobre en Nigeria está muy ocupado estudiando y no es capaz de ver un simple documental de naturaleza) llegó a este concluyente razonamiento:
“Ahora bien, si los animales son criatura inferiores, ¿cómo es que un humano que se hizo a imagen y semejanza de Dios puede estar pensando en que un hombre tenga relaciones sexuales con otro hombre y que una mujer pueda tener relaciones sexuales con otra mujer?”
Y además ha desarrollado un modelo matemático en el que vuelve a demostrar que la homosexualidad es mala. Vamos que no sé porqué este individuo no está ya siendo propuesto para los próximos premios Nobel y para la Medalla Fields todo en uno. Y no se crean que lo digo como escarnio porque él mismo indica en la entrevista:
“El profesor DS Aribuike me dijo deliberadamente que voy a ganar el premio Nobelun día, porque se encontró con que mis obras son reales y nadie ha hecho algo igual en ninguna otra parte del mundo.”
Modesto que es nuestro estudiante, a la par que brillante. Si es que lo tiene todo. Además otro profesor de la Universidad de Lagos, el Dr. Henry Boyo ha dicho también que nuestro protagonista
“Ha conceptualizado la idea de utilizar las ciencias y las matemáticas para demostrar que el matrimonio gay es malo. Algunas personas hacen afirmacionesdesde la religión, pero no fueron más allá para utilizar la ciencia y las matemáticaspara demostrar que el matrimonio gay es malo.”
Ahora este osado científico está buscando financiación para publicar sus brillantes resultados en alguna revista internacional, pero mientras tanto está en contacto con el gobierno nigeriano para asesorarles sobre sus increíbles descubrimientos.
Así que ya ven, en Nigeria sí que tienen claras sus prioridades y saben hacer Ciencia con mayúsculas e investigación religiosa de primera línea, lejos de esas ridículas investigaciones ateas orientadas a la búsqueda de medicamentos y tratamientos médicos, que dilapidando el dinero público intentan salvar vidas con lo que dificultan gravemente cada vez más la justicia divina, ya que permiten que aquellos que deberían morir bajo las plagas que bondadosamente nos envía nuestro piadoso dios continúen mancillando con su presencia la Tierra creada únicamente para solaz de los creyentes.
Fuente: Diario de un ateo
