Ése podría simplemente ser un titular más. Otra cruz que añadir a la lista de los recortes. Incluso puede haber quien piense que «puestos a recortar, mejor hacerlo con quienes han hecho algo para merecerlo (y, con ese pensamiento, cerrar toda posibilidad de debate -por incomparecencia del pensamiento racional, digo).
Pero para nosotros no se trata de un titular más. cuando hace casi dos años tuvimos la oportunidad de visitar la Unidad Terapéutica y Educativa de la cárcel de Villabona nos quedamos impresionados porque logramos entender que, aún teniendo en cuenta todo lo que Foucault nos muestra sobre las prisiones como concepto en su libro «vigilar y castigar«, la reinserción era un concepto abordable desde una óptica relativamente horizontal y colectiva.
Después de esa visita escribimos esto: «¿Y si las cosas sirvieran para algo? Llamémoslo Villabona«.
Tras conocer durante mucho tiempo esta unidad el gran Rafa Cofiño ha ido publicando algunos posts en su blog:
1) Salud y prisión: «esta revolución es vuestra»
2) Un espacio de libertad en salud: agentes de salud en la prisión.
3) (XIX) Salud Comuntiaria en Imágenes, por Lázaro Blanco.
El sistema se rompe, y lo hace por los lugares más débiles… presos, inmigrantes indocumentados, desahuciados, personas con enfermedad mental,…
Si se destruyen las cosas que funcionan habrá que empezar a pensar que hay ciertas cosas cuyo éxito y correcto funcionamiento son un estorbo para el modelo de sociedad que algunos buscan.
Asco. Algo de pena, pero fundamentalmente Asco.
Fuente: Médico Crítico