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Un estudio reciente publicado en Child Neuropsychology  ha encontrado que el consumo de alcohol durante el embarazo significa que el hijo es más propenso a desarrollar problemas con las habilidades sociales a medida que crece.

Los resultados del estudio indican que los niños con exposición prenatal al alcohol (PAE) que no tienen una discapacidad intelectual se encuentran en alto riesgo de desarrollar problemas significativos en una amplia gama de dominios cognitivos, emocionales, conductuales y sociales.

125 niños de edades comprendidas entre seis y 12 años participaron en el estudio, 97 de los cuales cumplieron con los criterios de diagnóstico para un trastorno del espectro alcohólico fetal. Los niños fueron sometidos a una evaluación integral de varios informantes sobre desenvolvimiento neurocognitivo, emocional, social, de comportamiento y de adaptación,.

Los resultados del estudio indicaron que los niños que tenían  exposición prenatal al alcohol (PAE), registraron puntuaciones significativamente más bajas en comparación con el grupo no expuesto, en las pruebas que miden el funcionamiento ejecutivo (los procesos que nos ayudan a conectar la experiencia pasada con el presente ,recursos, habilidades que utilizar para la organización y planificación), atención, trabajo / memoria visualespacial, abstracción lingüística,  comportamiento de adaptación, funcionamiento emocional / conductual y cognición social (comprensión de por qué la gente hace las cosas que hace).

El estudio mostró que, si bien los niños con PAE y los niños no expuestos se atribuyen intenciones hostiles hacia conductas provocativas por parte de sus compañeros, por ejemplo, los empujones, los niños afectados por los PAE fueron más propensos a atribuir intenciones hostiles a situaciones que no implican provocación física por ejemplo, preguntando si pueden jugar y que le digan ‘no’.

Los padres de niños con PAE también dieron mayores informes sobre el comportamiento de falta de atención y de hiperactividad / impulsividad y los niños mostraron ser también más propensas a mostrar síntomas depresivos.

El grupo de niños con PAE también mostraron tener más problemas sociales de acuerdo a las evaluaciones participan los padres y los maestros. Estos resultados mantuvieron su significación más allá de controlar por el CI, lo que demuestra que el confiar en el CI es solo para guiar los padres, los compañeros, y las expectativas de la escuela puede ser engañoso. El estudio también señala que esto también puede sugerir que los efectos negativos de los PAE están por encima y más allá del control de la inteligencia.

El estudio concluye sugiriendo que los resultados significan que se está convirtiendo cada vez más evidente que hay una necesidad apremiante para la identificación temprana de los problemas sociales relacionados con la exposición prenatal al alcohol y la intervención con el fin de tomar ventaja de la plasticidad del cerebro en desarrollo y para maximizar la probabilidad de efectuar una  mejoría funcional significativa.

Fuente: Justin L. Quattlebaum, Mary J. O’Connor. Higher functioning children with prenatal alcohol exposure: Is there a specific neurocognitive profile? Child Neuropsychology, 2013; 19 (6): 561 DOI: 10.1080/09297049.2012.713466