El presidente del «Consejo de Hombres Buenos de la Huerta de Murcia» y también presidente de la Junta de Hacendados ha sido imputado junto al vicepresidente y cuatro vocales de ésta en un posible delito de estafa por haber cedido el uso de miles de metros de acequias a promotores y constructores de la zona de la capital murciana para que construyeran viviendas sobre ellas. Esas cesiones serían ventas encubiertas, según la querella presentada por la Asociación para la Conservación del Patrimonio de la Huerta de Murcia (Huermur). Se da la circunstancia que el Consejo, Patrimonio de la Unesco, protagonizaba ayer mismo la ilustración del cupón de la ONCE.
En la querella criminal, Huermur, que agrupa a los huertanos críticos con la gestión de Sigifredo Hernández, estima que él, el vicepresidente Diego Frutos Saura, y los vocales Diego Melgar Sánchez, José Frutos Serrano,Ángel Cano Valverde y Benito Abellán Conejo han vendido de forma encubierta cauces de acequias y quijeros a distintos promotores “sin contar con la preceptiva autorización de la Junta General- Juntamento General-”, reza el texto al que ha tenido acceso El Confidencial.
Sigifredo Hernández Pérez como cabeza electa de la Junta de Hacendados de la Huerta de Murcia es también presidente del Consejo de Hombres Buenos, tribunal interno tradicional de los huertanos murcianos, reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y como tribunal consuetudinario por la Ley Orgánica del Poder Judicial, en cuya apertura anual tiene asiento, al igual que el representante del Tribunal de las Aguas de Valencia. A ambos organismos estaba dedicado el sorteo de la ONCE de este seis de octubre, dentro de la serie dedicada a las instituciones declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.