Navidad es tiempo de paz, las religiones pueden vivir en paz entre ellas, que los cristianos son tolerantes unos con otros. Bueno, todo esto parece ser falso en el mismo lugar que la tradición adjudica como cuna de Jesús.
La Basílica de la Natividad -un templo levantado por orden del emperador Constantino- está celosamente guardado por clérigos de la Iglesia Ortodoxa Griega y de la Iglesia Apostólica Armenia, y la Iglesia Catolica, y como muestra del «amor interdenominacional» cada credo tiene una parte del santuario y no pueden traspasar los límites so pena de fuertes disputas. Esto es justo lo que ha pasado este 28 de diciembre.
Sacerdotes de diferentes iglesias se trenzaron a golpes de escoba en la Iglesia de la Natividad en la ciudad cisjordana de Belén durante la tradicional limpieza previa a la festividad ortodoxa de Navidad, que se celebrará la semana próxima.El enfrentamiento se registró entre los clérigos griegos ortodoxos y armenios, informaron hoy la policía palestina y testigos. Ambas partes se acusaron mutuamente de haber ingresado en sus respectivos sectores. La policía palestina debió intervenir con porras para separar a ambas partes.
Estos hechos me traen a la mente las palabras del ateo Sam Harris «Doctrinas religiosas incompatibles han balcanizado nuestro mundo en comunidades morales separadas –cristianos, musulmanes, judíos, hindúes, etc.– y estos desacuerdos se han convertido en una fuente continua de conflicto humano. Ciertamente, la religión es hoy en día una fuente activa de violencia, tanto como lo fue en cualquier momento del pasado.»
Fuente: Red de Blogs Ateos