Algunas zonas de Malí están controladas por islamistas socios de Al-Qaeda, que niegan la más básica libertad individual y que se atoran de sólo imaginar el concepto de libertades civiles, así que asesinaron cruelmente a una pareja que no se había casado:
Ambos fueron colocados «en dos agujeros y los islamistas los lapidaron hasta que murieron», declaró uno de los testigos, cuyas declaraciones fueron confirmadas por otra persona presente.
El primer testigo dijo que «la mujer perdió el conocimiento tras los primeros golpes», mientras el hombre «gritó una vez antes de callarse».
El segundo testigo precisó que «el hombre y la mujer tienen dos niños, el más pequeño de sólo seis meses». Según él, la pareja vivía fuera de Aguelnok.
«Fueron traídos hasta la ciudad por islamistas que les lanzaron piedras hasta que fallecieran», dijo. «La gente salió para ver lo que pasaba. Había testigos», precisó.