La religión no merece ni más ni menos respeto que otras producciones notables de la imaginación humana. Podemos reirnos de Marx, Jesús yMahoma, del cristianismo y del islam. Exigir a los no creyentes que se comporten como creyentes ante símbolos religiosos es una excesiva pretensión. Lo que las religiones llaman “respeto” no es más que la sumisión universal a su particular imaginario social.
–Robert Redeker (filósofo francés, amenazado de muerte por una fatwa, desde 2006)