La fundación fue creada por Mehran Keshe en junio de 2012. No tiene ánimo de lucro, pero si tienes dinero y quieres financiarla, nadie te va a hacer ascos.
Keshe, de origen iraní, afirma que se graduó en la Universidad Queen Mary de Londres en 1981 como ingeniero nuclear. Tengo mis dudas sobre la autenticidad de esta licenciatura según he podido leer en varios foros críticos con la fundación. Ante la consulta por correo a la Universidad de Londres para que lo confirmasen. Esta fue su respuesta:
Unfortunately, we are bound by the terms of the Data Protection Act and therefore require a signed declaration of consent from the candidate before disclosing academic details to a third party.
Please re-send your request, with a signed declaration, to stuverification@qmul.ac.uk along with the candidate details and we will respond in due course.
Desafortunadamente la confirmación o no de haber obtenido un título académido está sujeta a la ley de protección de datos, por lo que si el propio implicado (el Sr. Keshe) no firma una autorización, no me podrán confirmar nada. No sé… no me atrevo a pedírsela. ¿Qué va a pensar?
En conclusión, si cualquiera puede decirte que está licenciado por una Universidad como la de Londres (se me están viniendo a la cabeza más nombres de personas que afirman estar titulados aquí) y no se puede constatar, esa afirmación tiene el mismo valor que si te dijesen que están certificados como destripaterrones, es decir ninguno.
Antes de enarbolar la bandera multicolor de la fundación, Keshe, al más puro estilo Richard Branson, se planteó la meta de llevar a gente común a la Luna. El coste del viaje: 50000 €. Para poder realizar el proyecto se implementaron varias fases. En la primera fase, los viajeros debían hacer un pago de 8000 €. En la segunda fase, ….
En el histórico web podemos ver todavía la página en la que se ponía este precio a las ilusiones espaciales de alguien lo suficientemente incauto como para pagar esta suma por fe. Me gustaría pensar que nadie llegó a hacer la reserva, aunque no pondría la mano en el fuego. En la actualidad no hay rastro del sitio keshespace.com, lo mismo que del aunque seguro que el dinero le habrá sido devuelto a sus propietarios.
El reactor de Keshe
Uno de los pilares de la fundación Keshe es su reactor de plasma . Según su autor, es una fuente inagotable de energía que salvará a la humanidad y nos aliviará de la dependencia de los combustibles fósiles. Pero no hay evidencias claras sobre el funcionamiento de este dispositivo. Incluso en su canal de youtube tiene un vídeo explicando el funcionamiento de un reactor de plasma creado a partir de una botella de coca cola con un misterioso líquido y unos electrodos insertados.
Siguiendo la línea general de toda la fundación, no se da ningún detalle que podría posibilitar que un tercero repita el experimento para validarlo. Quizá sea eso lo que se pretenda evitar.
En el vídeo se confunde voltaje con potencia. El que un electrolito produzca una diferencia de potencial entre dos bornes no es algo muy novedoso. Se llama batería, y se puede hacer incluso con un limón.
Ampliar en: LA MENTIRA ESTÁ AHÍ FUERA
A fuerza de revoluciones por minuto, cargan las baterías usadas por diez lámparas del paseo que da a un río. Pedalean ocho horas diarias y cada tres días de pedaleo se les quita un día a sus condenas.
Este es uno de varios proyectos que están siendo implementados en todo Brasil, destinados a aliviar la situación de hacinamiento que se vive en las cárceles superpobladas y ayudar a mejorar la autoestima de los presos, lo que se espera que ayude a que no reincidan en el delito cuando recuperen la libertad.
Si bien hay sectores que opinan que se les tiene demasiada consideración a los detenidos, estas iniciativas son vistas por sus promotores como formas efectivas de romper el ciclo de violencia predominante en los centros penitenciarios del país.
Fuente: Clarín.com