El FBI está investigando a Herbalife, la compañía de nutrición y pérdida de peso (productos sin ninguna evidencia científica) a la que el gestor de hedge funds William Ackman acusó de estar articulada de forma piramidal, dijeron el viernes fuentes familiarizadas con la investigación. La noticia, publicada en un principio por el periódico Financial Times, provocó una caída cercana al 14 por ciento en las acciones de la empresa. Una fuente cercana al asunto dijo que la pesquisa comenzó hace un tiempo, pero no quiso dar más detalles.
Exdistribuidores de Herbalife con los que Reuters se comunicó dijeron que fueron contactados por agentes que estaban interesados en descubrir más sobre las prácticas comerciales de la compañía, incluyendo cómo contrataban a nuevos miembros para su esquema de distribución. Los agentes del FBI también están investigando documentos obtenidos de los exdistribuidores, según otras dos fuentes cercanas al proceso.
Herbalife dijo el viernes que no había recibido notificaciones de parte del FBI o del Departamento de Justicia sobre alguna investigación, pero no es inusual que las fuerzas del orden investiguen a una compañía sin notificar a sus directivos. La empresa ha negado firmemente haber desarrollado un esquema piramidal, en el que los distribuidores ganan más dinero por contratar nuevos miembros que vendiendo productos a consumidores.
La compañía, que declaró ingresos por ventas de 4800 millones de dólares (3460 millones de euros) el año pasado, emplea una vasta red de distribuidores independientes que venden sus polvos y batidos en más de 80 países, entre ellos China, su mercado de crecimiento más rápido.
Durante meses, Herbalife ha sido objeto de una batalla entre grandes inversores. Ackman, que dirige el fondo de inversión Pershing Square Capital Management de 13000 millones de dólares, denunció por primera vez el fraude de la compañía en diciembre de 2012, cuando desveló una posición en corto de 1000 millones contra Herbalife. Las acciones de Herbalife han caído un 34,6% este año.
Fuente: Público.es
Herbalife ha saltado a la actualidad en los últimos días después de que Sanidad investigara sus productos adelgazantes ya que sospecha que pueden ser tóxicos. Sin embargo, ahora algunas voces de ex clientes y expertos denuncian, además, que la compañía es una secta y que se dedica a captar adeptos, según publica La Vanguardia.
María, una santanderina de 22 años que fue clienta de la empresa durante dos meses, asegura al diario que «todo era muy raro, te comen la cabeza hasta que te involucras y no ves nada más».La joven quería bajar de sus 82 kilos y gastó 120 euros en varios productos, con los que consiguió perder «tres kilos en una semana, pero eso fue todo». Tras esto, llegaron los vídeos de Mark Hughes (el fundador de Herbalife) que debía ver a diario, música especial para los clientes, charlas telefónicas sobre las virtudes de la compañía y reuniones.
«Me decían (los demás clientes) que los productos eran buenos para todo […] que curaban hasta el cáncer y que se los pusiera en el biberón a mi hijo», asegura María.
«El producto es la religión»
Según Miguel Perlado, psicólogo de la entidad Atención e Investigación de Socioadicciones, la santanderina tuvo suerte, porque hay personas que «se llegan a aislar de la familia» y que cada año atienden varios casos de personas que han sido captadas.
«Todo el mundo se sorprende de que una organización no religiosa sea una secta» dice Perlado, pero aquí «el producto es la religión y su fundador, el ya fallecido Mark Hughes, el líder», concluye.
El responsable de Herbalife en España ha negado todas estas acusaciones y asevera que la compañía «es legal», pese a que fuentes del ministerio de Sanidad admitieron que la empresa emplea métodos de «captación y adoctrinamiento pseudosectarios», pero que ellos no pueden hacer nada porque su trabajo se basa sólo en garantizar la seguridad de los productos.
Fuente: 20Minutos.es
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