El eterno aspirante al trono del Reino Unido y ya anciano príncipe Carlos de Inglaterra, que lleva más de dos décadas batallando (personalmente y a través de su fundación) para que el sistema sanitario británico incluya al ya conocido y variopinto conjunto de remedios de curanderismo que se agrupa bajo el epígrafe de las mal llamadas medicinas alternativas. Pues bien, dentro de esta particular cruzada por el oscurantismo pseudocientífico y paramédico nuestro desocupado príncipe acaba de ser acusado en Inglaterra de presionar al ministerio de sanidad del Reino Unido a favor de la homeopatía por haber escrito durante años hasta 27 cartas a los respectivos responsables sanitarios del país para intentar influenciar las decisiones sanitarias.
“La homeopatía es un disparate. Los remedios homeopáticos no contienen nada en absoluto. Los estadounidenses han gastado dos mil millones de dólares en investigar estas cosas y no han encontrado una sola que funcione»