«Tener hijos es una actividad de alto riesgo». Es la conclusión a la que llegaron en las I Jornadas de Responsabilidad Civil organizadas por la Escuela de Práctica Jurídica del Principado de Asturias en colaboración con el Colegio de Abogados de Oviedo tras la impartición de la ponencias que corrió a cargo de la magistrada de la Audiencia Provincial de Asturias Paz Fernández-Rivera.
La conferencia ‘Accidente sufridos por menores, la responsabilidad de la conducta paterna‘- dejó claro que los padres llevan todas las de perder en caso de que sus hijos cometan hechos dolosos. Y que, además de a la responsabilidad civil que se deriva de las acciones de los menores, los progenitores se enfrentan a «una dualidad legal» en la que los actos se diferencian en función de la edad de quien los lleva a cabo.
«Si los menores tienen menos de 14 años, se aplica el artículo 1903 del Código Civil. Si son mayores de 14, la Ley Orgánica de Responsabilidad del Menor dicta una responsabilidad directa y solidaria de los padres junto con el menor». Y hay un tercer supuesto: el de los mayores de 18 años que están sometidos a patria potestad prorrogada o rehabilitada. «En realidad, es como si fueran menores y, en ese caso, hay una responsabilidad directa y subjetiva de los padres», precisó Fernández-Rivera, que abogó porque, con el objetivo de clarificar las cosas, «la responsabilidad se aúne es un solo texto jurídico».