Según cuentan en la BBC, un ataque químico como el ocurrido en Siria no provoca lesiones físicas externas, ni quemaduras en la piel, pero sí signos de asfixia y dificultad respiratoria, llegando a dejar una tonalidad rosada-azulada en la piel. Además, dejan algunos signos post mortem bastante característicos, como bien explica el excomandante Hamish Bretton-Gordon, de las Fuerzas Británicas contra el Terrorismo Químico y Biológico :
“Algunos de los síntomas, como la boca abierta, la mirada de muertes esculturales, son muy similares a lo que vimos en Halabja (el ataque con armas químicas que en 1988 Saddam Hussein lanzó indiscriminadamente para dar una lección a sus habitantes kurdos) donde miles de personas murieron por gas nervioso”,
“Algunas de las imágenes del vídeo muestran a personas temblando, con las pupilas contraídas; sinónimos de algún tipo de agente químico”
Para los expertos, el posible agente químico usado en Siria parece ser el agente nervioso Sarín, más tóxico aún que el gas mostaza (otro agente químico que posee Siria en gran cantidad). E incluso podría existir otra sustancia mucho peor llamada gas VX.
Por un lado, el gas mostaza se caracteriza por provocar conjuntivitis, quemaduras en la piel, dolor de garganta, tos, susceptibilidad a infecciones e incluso neumonía. Como hemos señalado al principio, en el último ataque en Siria no existen lesiones externas, por lo que este tipo de agente químico se descarta.
Pero, por otro lado, tenemos el gas Sarín, hasta 20 veces más mortal que el gas mostaza e imposible de detectar, ya que carece de olor, sabor o color. Este gas ataca directamente al sistema nervioso causando un fallo respiratorio y la muerte en pocos minutos. Eso si, incluso las exposiciones leves causan síntomas, como irritación de los ojos, secreción nasal, visión borrosa, babeo, tos, presión en el pecho, diarrea, confusión, mareos y náuseas (todos ellos síntomas detectados en algunas víctimas en Siria, gracias a los vídeos que han circulado por la Red).
Finalmente, el gas VX es el peor de los tres, un agente nervioso conseguido con la mezcla de los dos anteriores, que causa quemaduras, sudoración, irritación, espasmos musculares, rinorrea, presión en el pecho, dolor de cabeza, náuseas, vómitos y pérdida de la coordinación, entre muchos otros síntomas.
Eso sí, parece que los expertos no acaban de creer que lo ocurrido en Siria sea un ataque químico, ya que las personas que están tratando a los individuos que han tenido un contacto leve con este gas no utilizan ningún tipo de protección, y aún asi parece que no se contaminan ni presentan síntomas, cosa que si debería pasar si se han usado armas químicas (muy contagiosas).
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