Se venden como un sencillo dispositivo que, con solo conectarlo a cualquier enchufe eléctrico conseguirá un ahorro en torno a un 20% de energía eléctrica en la factura.
La primera sospecha aparece cuando te das cuenta que este equipo lo puedes encontrar a la venta por 40€ en muchas tiendas online/físicas en España, pero a su vez lo encuentras en Ebay por poco más de 2€ con gastos de envío incluidos desde China.
En NERGIZA.COM han desmontado uno de estos dispositivos, con el siguiente resultado:
Vemos una pequeña placa electrónica que, al parecer, solo sirve para controlar los dos LEDs de señalización (¿señalización de que?) y un condensador de los que se suelen utilizar para aplicaciones electrónicas.
[Antes de seguir leyendo te recomiendo echar un vistazo a nuestro post sobre energía reactiva, sobre todo si no tienes claros los conceptos de energía/potencia reactiva, factor de potencia, etc…]
Los condensadores se suelen utilizar en el sector industrial para compensar la energía reactiva consumida y así ahorrar en la factura eléctrica, pero para el caso que nos ocupa debemos de que tener en cuenta dos cosas:
Respecto a medidas reales del supuesto ahorro de energía, todas son negativas, incluso aumenta el consumo. Ver datos reales en NERGIZA.COM.
En una vivienda no necesitamos compensar el consumo de reactiva, y aunque lo necesitásemos, este aparato no lo iba a conseguir, principalmente porque carece de control alguno de su capacidad.
La Dirección General de Consumo de la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid ha impuesto una sanción a la empresa Apple de 47000 euros por el desarrollo de una campaña publicitaria que inducía a sus clientes a pensar que un producto que comercializaba tenían un año de garantía en lugar de dos, como marca la normativa, según han indicado a Europa Press fuentes de la Consejería de Economía y Hacienda.
La sanción deriva de una denuncia que interpuso la organización de consumidores Facua contra esta empresa en septiembre de 2011 al entender que incurría en publicidad engañosa e infringía el texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios, que recoge que «el vendedor responde de las faltas de conformidad que se manifiesten en un plazo de dos años desde la entrega».
Según recuerda este colectivo, la compañía envió de forma «masiva» correos electrónicos comerciales a usuarios donde indicaba que «la garantía de un año del dispositivo» estaba «a punto de caducar para que contratasen el producto AppleCare Protection Plan».
«Protege tu iPhone 4 un año más con AppleCare Protection Plan. Estarás ampliando la cobertura del servicio técnico y reparaciones a dos años a partir de la fecha de compra de tu iPhone», recogía el anuncio denunciado por la organización de consumidores.
Independientemente de que el seguro comercial ofrecido por la compañía pueda ampliar las condiciones de la garantía legal, la publicidad de este servicio «era confusa para los usuarios», según detalla Facua.
Por tanto, la organización insta a los consumidores que hayan contratado este servicio pensando que su garantía legal era sólo de un año que tienen derecho a reclamar la devolución del importe abonado.
La Autoridad Antimonopolio de Italia ha declarado al fabricante de ordenadores y teléfonos móviles Apple culpable de ofrecer una garantía engañosa, que tiene que ver con el servicio de cobertura AppleCare, ya que no cumple con las garantías ofrecidas por dos años sin costo que exige la ley italiana y en general todos los países de la Unión Europea. Ante esta determinación, Apple ha sido sancionada con una multa de 900 000 euros, equivalente a cerca de 1.2 millones de dólares.
A través de un comunicado, las autoridades señalaron que Apple en lugar de ofrecer una garantía sin costo por dos años, ofrecía una garantía de un año y hacía un cobro extra para extender la garantía a dos años a través de AppleCare Protection Plan. El problema es que los consumidores italianos estaban siendo engañados al pagar por algo que deberían de haber recibido sin costo adicional.
Esta situación de publicidad engañosa también se da en España, lo cual ha sido denunciado por la asociación de consumidores Facua.