Imagina una red WiFi capaz de alcanzar velocidades de varios terabits por segundo, capaz de transferir una película en alta definición en menos de un segundo. Quizás parece utopía, pero Ian Akyildiz, del Instituto Técnico de Georgia (Georgia Tech), han desarrollado una nanoantena de grafeno capaz de lograrlo. Lo más interesante es que a distancias cortas (de pocos centímetros) se alcanzan velocidades de 100 Tbits/s lo que puede tener interés en la comunicación interna entre componentes de dispositivos electrónicos o entre redes de sensores en sistemas confinados (útiles en química, biología o medicina). Por supuesto, el mayor problema a día de hoy es el coste prohibitivo del grafeno (unos 3000 euros por metro cuadrado); en la nanoantena hay que fabricar dos trozos de grafeno de entre 2 y 100 nanómetros de ancho y un micrómetro de largo, que han de ser colocados en el lugar adecuado de la nanoantena. Quizás el grafeno trabajando a frecuencias de terahercios sea el futuro de la tecnología 5G que se podría implantar alrededor del año 2020. Nos lo ha contado Alex Wright, “Tuning In to Graphene,” News, Communications of the ACM 56: 15-17, Oct 2013 [pdf gratis].
Fuente: La Ciencia de la Mula Francis
Uno de los aportes de la medicina basada en la evidencia menos reconocidos pero no menos importante que otros en al de haber dado un marco conceptual a la utilización de la información por el medico practico. Con aportaciones de las ciencias de la información y sentido práctico han creado conceptos como la pregunta clínica y su formulación o el modelo piramidal 4-6 S que introduce a las búsquedas no solo la pertinencia o exactitud sino el concepto de tiempo o esfuerzo empleado en localizar y utilizar la información requerida.
En este modelo piramidal el piso más alto, y por tanto el que utilizar primero, está representado por los denominados Sistemas, en los que las características individuales del paciente se ligan automáticamente a la mejor y más actualizada evidencia que coincida con las circunstancias específicas del paciente y del médico, y que le proporciona a este los aspectos clave de la gestión del caso. En el artículo donde se explica el modelo se ponen como ejemplo, los sistemas informatizados de apoyo a la toma de decisiones, si bien se hace hincapié en que pocos de estos, por no decir ninguno, sistemas estaban disponibles en ese momento.
La cima de la pirámide estaría ocupada por un sistema de información clínica que integra y resume todas las evidencias provenientes de la investigación, pertinente e importante sobre un determinado problema clínico, que se actualiza conforme aparezcan nuevas evidencias y que se vincula automáticamente a través de la historia clínica electrónica. En estos sistemas informatizados de apoyo a la toma de decisiones, los datos detallados de cada paciente se introducen en un programa de ordenador y se parean con programas o algoritmos de una base informatizada de conocimiento médico, lo que resulta es la generación de recomendaciones para los médicos específicas para cada pacientes. Si la historia clínica electrónica incorporara un SIATDs que vinculara de forma fiable las características de un paciente con guías de atenciones actuales y basadas en la evidencia, no es necesario ir más allá (hacia abajo) en el modelo piramidal.
Curiosamente en una reseña de Oncology Expert Advisor una aplicación medica de una nueva generación de ordenadores “cognitive computing” en concreto Watson de IBM, se dice:
“Oncology Expert Advisor estará disponible para los oncólogos afiliados al hospital MD Anderson a través de ordenadores de sobremesa y dispositivos móviles. La plataforma tendrá los datos del paciente, tanto la contenida en formularios estructurados como en notas clínicas no estructuradas, y harán coincidir con todo tipo de información, desde los datos clínicos, protocolos de investigación, las guías de tratamiento, para hacer una recomendación de tratamiento más personalizado”.
Al identificar y ponderar las conexion de los datos del perfil de un paciente y el corpus de conocimiento de la literatura médica publicada y guías Watson y Oncology Expert Advisor del MD Anderson puede proporcionar un tratamiento basado en la evidencia y las opciones de gestión personalizadas a la paciente, para ayudar al tratamiento del médico y las decisiones de atención.
Fuente: PRIMUM NON NOCERE 2013