Gene Bransfield, investigador de seguridad creo un collar con un chip Spark Core, cargado con firmware hecho por el investigados así como una tarjeta WiFi, un minúsculo módulo GPS y una batería, todo lo necesario para mapear las redes en el vecindario y detectar aquellas que podrían ser vulnerables a cualquier intruso.
El collar llamado WarKitteh lo colocó en el gato de la abuela de su esposa, Coco, que como cada día salió a recorrer las calles y de paso ayudar a Bransfield con el trabajo que debutará en la DefCon, la conferencia de hackers en Las Vegas.
La conferencia que ofrecerá Bransfield se llama “Como convertir a tus mascotas en armas” aunque reconoce que WarKitteh no es una amenaza de seguridad, el collar fue creado para entretener a los hackers de la audiencia.
La parte interesante es que a pesar de que la encriptación WEP tiene más de 10 años y es conocida su facilidad para penetrarla, todavía existen muchas redes que la usan.
Fuente: conéctica
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f-Secure ha confirmado que los terminales Xiaomi con Android envían constantemente datos a un servidor en China que en principio no aporta ninguna ventaja al usuario, es decir, ni se trata de un servicio de sincronización, ni tampoco de uno de backup, por lo que la emisión de esos datos lo único que hace, de momento, es recopilar información contenida dentro del dispositivo.
Tal como apuntan las pruebas de F-Secure, justo después de sacar el terminal de caja, introducir la tarjeta SIM y actualizar la conexión WiFi y la localización, el terminal envía automáticamente el operador, número de teléfono y el IMEI a un servidor en China que apunta a la dirección api.account.xiaomi.com.
El problema con este sistema de Xiaomi es que repitiendo el proceso anterior e incluyendo contactos en nuestro listín telefónico, el terminal automáticamente reenvía estos números al mismo servidor, y todo ello sin que en ningún momento se alerte al usuario, al menos con un mensaje dedicado fuera de los términos y condiciones de uso del terminal.Además este envío de datos se realiza automáticamente aunque el usuario no haya configurado nigua servicio de sincronización en el terminal, por lo que se trata de un envío autónomo de datos que utilizan el mismo servidor que los servidores de Mi Cloud.
Fuente: ALT1040
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Tiene el tamaño de un sello de correos, pero en su interior contiene el equivalente a un millón de neuronas con 256 millones de conexiones sinápticas programables. El nuevo chip de IBM da un paso más hacia el objetivo de crear un procesador capaz de simular el funcionamiento del cerebro humano.
TrueNorth, que es como se llama este chip, es un salto cuantitativo impresionante respecto a la primera versión, que solo equivalía a 256 neuronas con 262144 sinapsis programables. De un único núcleo neurosináptico, este proyecto de IBM y el programa DARPA SyNAPSE ha pasado a 4096 núcleos.
Con todo, las cifras son irrisorias en comparación con las de un cerebro humano. Solo en la corteza cerebral tenemos entre 15000 y 33000 millones de neuronas. Cada milímetro cúbico de córtex cerebral contiene aproximadamente 1000 millones de sinapsis.
El reto de la computación cognitiva sigue estando lejos, pero eso no le quita mérito a TrueNorth y, de hecho, demuestra la potencia que tiene esta arquitectura de cara al futuro. Mientras llega el momento en el que tengamos que temer que una inteligencia artificial nos ponga en la lista de especies a extinguir, TrueNorth será especialmente útil para desarrollar dispositivos en los que es importante un funcionamiento similar al del cerebro humano.
Ampliar en: GIZMODO