Una empresa española especializada en el equipamiento y optimización de los espacios de trabajo, ha lanzado Gesture, una silla que se adapta a las nuevas posturas de trabajo fruto del incremento en el uso de nuevas tecnologías como tabletas y teléfonos inteligentes.
Gesture es el resultado de un estudio global entre 11 países que analiza cómo han cambiado las posturas de trabajo en la actualidad a raíz del cada vez más frecuente uso de dispositivos electrónicos. La conclusión: la tecnología ha desencadenado nueve nuevas posturas y patrones de comportamiento que ninguna silla en el mercado actual es capaz de soportar de forma adecuada.
Está inspirada por el movimiento del cuerpo, por lo que está compuesta por un sistema de partes interconectadas que ofrecen soluciones a las necesidades individuales de cada persona. Carol Stuart Buttle, CPE, ergonomista de Stuart-Buttle Ergonomics, comenta que “si la silla no se mueve con el usuario, las personas adoptan posturas complejas para intentar compensar lo que de por si es incómodo.
Fuente: TICbeat