La muerte en La India es un asunto privado. El epidemiólogo Prabhat Jha y otros investigadores llevan años luchando porque la situación cambie y los millones de muertes que se producen en el país, muchas en remotas aldeas, aparezcan en algún registro público. Un programa estatal bautizado como el Estudio del Millón de Muertes (Million Death Study) pretende documentar las muertes producidas entre 1997 y 2013 mediante encuestas personales a un millón de individuos. Hasta el momento llevan realizadas 450000 y los primeros datos están sirviendo para trazar un mapa de la mortalidad en el país que ya se está utilizando para cambiar la política sanitaria.
Tal y como explican en Nature, cuando tenía solo diez años el propio Prabhat Jha vivió la experiencia de la ‘muerte anónima’. Él y su familia vivían en Canadá cuando recibieron la noticia de que su abuelo había muerto en La India. La causa no estaba clara y, como sucede de forma habitual, el anciano había muerto en su casa, sin visitar ningún hospital. La madre de Jha regresó a la aldea en busca de información, pero no averiguó nada. Años más tarde, cuando Jha se hizo médico, revisó las notas de su madre y llegó a la conclusión de que su abuelo había muerto por un infarto cerebral, aunque la causa de la muerte nunca constará en los archivos públicos ni en ninguna estadística.
Los esfuerzos por documentar las causas de las muertes están dando sus primeros frutos. La revista Nature publicaba hace unos días una serie de gráficos ilustrando los niveles de incidencia de distintas enfermedades por regiones. El proceso consiste en la visita sobre el terreno de unos 900 encuestadores que acuden a distintos lugares del país para preguntar por la causa de muertes no registradas. Con los datos obtenidos, dos médicos analizan cada caso y concluyen esta denominada “autopsia verbal” que determina la causa de la muerte.
El sistema alternativo que se propone consiste en introducir los síntomas en un programa matemático y determinar conforme al modelo estadístico cuál es la afectación real de la enfermedad. Algunos estudios apuntan que los ordenadores pueden ser más precisos que los propios médicos a la hora de determinar cuál ha sido la causa de una enfermedad, y ya se está utilizando un modelo mixto en casos como el programa INDEPTH, que registra los nacimientos y muertes en 17 países africanos y asiáticos con un modelo probabilístico y verbal a la vez. El objetivo, en cualquier caso, es acercarse lo más posible a la realidad para poder determinar de qué muere la gente, cómo se extienden las enfermedades y qué medidas se pueden tomar para atajarlas.
Referencias: Global health: One million deaths (Nature) | Verbal autopsy methods questioned (Nature) | Más info: Million Death Study
Artículo completo en: CUADERNO DE CULTURA CIENTÍFICA
La globalización económica está impulsando un modelo en el que India se convierte en el proveedor de servicios tecnológicos más importante del planeta. Las previsiones apuntan a que el total de exportaciones en 2010 alcance los 60 billones de dólares
Dos términos son los que actualmente están dirigiendo la economía india hacia los primeros puestos del ránking mundial: outsourcing, o subcontratación, y offshoring, o subcontratación en el extranjero.
Ganesh Prabhu, Director de desarrollo de negocio de WiPro Technologies, define el nuevo paradigma de la siguiente manera: “todo lo que se pueda digitalizar se puede subcontratar, y todo lo que se pueda digitalizar y subcontratar, se puede desarrollar directamente en otro país”. No en vano su compañía, con base en Bangalore (India), aparece en los primeros puestos del ránking mundial de offshoring en cuanto a servicios, desarrollo de software y gestión de call centers.
Cada vez son más las compañías de todo el mundo que apuestan por el llamado Bussiness Proces Outsourcing (BPO), subcontratando la gestión de algunos procesos a empresas especializadas. Según Anju Kumar, agregada comercial de la Embajada de la India en Madrid, “India es responsable de casi el 70% de la industria global en offshore de Tecnología Informática, y casi la mitad de la industria de BPO global”.
IBM, Microsoft, Cisco Systems e Intel han anunciado inversiones en India por valor de 10.000 millones de dólares
El interés de las empresas por este país asiático es cada vez más evidente, como lo demuestra, por ejemplo, la inversión de 6.000 millones de dólares en tres años anunciada por IBM a principios de junio. Este acuerdo se suma a otras inversiones multimillonarias, como la de 3.900 millones de dólares que anunciaron conjuntamente Microsoft, Intel y Cisco Systems.
¿Por qué India?
Nitin Seth, Consultor estratégico de la multinacional McKinsey en India, asegura que el país “cumple con todos los requisitos para liderar el mercado de offshoring mundial”.
Por una parte, India cuenta con abundante talento: produce 200.000 ingenieros, 300.000 técnicos y más de 3 millones de universitarios cada año. A estas cifras hay que sumarles también el hecho de que muchos estudiantes se trasladan a lo largo de la etapa universitaria a los Estados Unidos para completar su formación. No obstante, la agregada comercial de la Embajada de la India en Madrid reconoce que “aunque actualmente el nivel de inversión en educación ya es importante, y se están realizando esfuerzos para incrementarlo, todavía hay que prepararse mucho mejor para el futuro”.
El inglés como idioma oficial proporciona valor añadido a la mano de obra del país
Por otro lado, los costes de mano de obra son mucho más reducidos que en la mayoría de países desarrollados, donde la proporción media se sitúa en 4 veces más de sueldo por la misma tarea.
Talento a buen precio es un fórmula mágica para atraer inversiones extranjeras, aunque “todavía quedan algunos puntos débiles como la escasez de infraestructuras o la herencia de un derecho laboral complicado”, según afirma Rama Velamuri, profesor del IESE.
A pesar de que estas condiciones también se dan en otras economías emergentes como podría ser China, existe un valor diferencial que ha provocado que la externalización de servicios se concentre en India: el idioma. Las empresas anglosajonas que externalizan sus call centers, por ejemplo, necesitan que las personas que vayan a atender a sus clientes hablen a la perfección el inglés, cosa que en China es un hecho poco habitual. Lo mismo ocurre con las empresas de todo el mundo que mantienen relaciones internacionales y que por tanto necesitan que su plantilla, sea de donde sea, domine este idioma.
Las relaciones con España son todavía incipientes
El Presidente del Gobierno español, José Luís Rodríguez Zapatero, se desplazó recientemente a la India en viaje oficial para poner las relaciones económicas “al nivel que corresponde”. Los contactos entre ambos países no han sido, hasta ahora, lo suficientemente fluidas para que las Pymes, que forman más del 90% del tejido empresarial español, puedan aprovechar las oportunidades que presenta India en materia de offshoring.
El Presidente del Ejecutivo se mostró decidido a subsanar esta situación con una serie de medidas entre las cuales destaca el acuerdo sellado entre el Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) y el Comité de Desarrollo Tecnológico Indi (TDB), para poner en marcha un Programa Bilateral de Coorperación para desarrollar iniciativas conjuntas en el ámbito de la transferencia de tecnología, investigación industrial, e innovación tecnológica.
Fuente: Noticias.com