El ambiente general tras la presentación es un “pues vale” mezclado con un “está bien pero eso ya lo sabía”. Y es que en las semanas previas se habían filtrado el 80% de las novedades, con fotos incluidas. Y es como bien decían nuestros compañeros de Omicrono, esto con Steve Jobs no pasaba. Uno llegaba a una presentación de Apple con el corazón en el puño preguntándose a ver que sacan o a ver con qué iba a sorprendernos la competencia. Hoy, ya lo sabíamos todo. Efectivamente, el iPhone 5 ha confirmado todos los rumores.
Y es que lo que más me ha llamado la atención una vez más es que nada de lo que se ha presentado es nada nuevo para los que llevamos usando hace tiempo. En la web El Androide libre, hacen un breve repaso.
El mensaje principal de este artículo es demostrar con hechos una cosa que sabemos todos: Apple lleva ya un tiempo un paso atrás de Android. Todas las novedades que presenta las llevamos disfrutando desde hace mucho tiempo en Android. Lo peor de todo es que lo venden como novedades y la gente se lo cree. El resultado: nadie está impresionado.
Que sí, que es un teléfono muy potente, que tiene un diseño excelente. No lo niego. Tan solo digo, que todo lo que venden como novedades, todos los usuarios de Android y todos los medios especializados lo llevamos usando desde hace mucho tiempo. Decidme una sola novedad de Apple que os haya impresionado. Os aseguro que tendréis que pensar un buen rato.
Por otro lado, y es lo que decía al principio del artículo, Apple está perdiendo la magia de sus keynotes. Yo recuerdo como impresionante la presentación del iPhone 4: un cambio radical de diseño, nuevas presataciones, sorpresa general. Pero desde entonces las novedades son escasas, cambian pocas especificaciones técnicas y poco más. Realmente, el iPhone 5 es un iPhone 4S con la pantalla más grande y ya está. Además, una semana antes ya lo conocemos todo y por tanto la keynote no produce ilusión alguna.