La crisis económica, unida a las continuas subidas en la factura de la electricidad está llevando a muchas familias españolas al límite de sus posibilidades. Esta situación de desesperanza es el caldo de cultivo perfecto para la aparición de productos milagro, que le permitirán ahorrar entre un 50 y un 75% de lo que paga a las eléctricas, por supuesto, sin tener que reducir el consumo.
Productos como energy saver pro, g-ner-g u otros muchos, prometen importantes ahorros simplemente enchufando a la red de su casa un aparato con una misteriosa tecnología. ¿Cómo lo consigue? Mejor dicho, ¿lo consigue?
La única manera legal de ahorrar energía es:
La energía es la capacidad para realizar un trabajo. Se mide en Julios en el sistema internacional de unidades, pero por razones prácticas las eléctricas nos presentan el consumo de energía eléctrica en kwh. Es correcto porque la energía es el resultado de aplicar una potencia (Watio) durante un tiempo (hora):
E = P * t
Así, si usted tiene un radiador de 1000w y lo conecta durante una hora, en la factura de la luz se le cargará 1 kwh. Ningún aparato que conecte a la red eléctrica permitirá que el radiador consuma 1 kwh de energía tomando de la red eléctrica menos de esa energía, porque recordemos que la energía no puede crearse de la nada.
Los dispositivos conectados a la red eléctrica de corriente alterna (la que tenemos en casa) utilizan la energía de una manera peculiar. Parte de la energía es consumida realmente para producir un trabajo. Es la potencia activa, que se mide en watios y se representa por la letra P. La otra parte es la potencia reactiva, que surge cuando conectamos a la red motores eléctricos, cuyas bobinas almacenan temporalmente la energía en forma de campo magnético que son devueltos a la red en el siguiente ciclo. Se mide en voltio amperios reactivos (VAr) y se designa con la letra Q. La potencia aparente sería la resultante de ambas, y se mide en VoltioAmperios (VA).
Las eléctricas les cobra a las industrias por la potencia aparente y les instala las capacidades necesarias para acercar el factor de potencia lo más posible a la unidad, ya que si este factor de potencia es bajo, les obliga a poner tendido eléctrico más grueso, capaz de soportar intensidades de corriente más altas, para proporcionar una misma potencia efectiva en watios.
Si abrimos uno de estos dispositivos, comprobamos que efectivamente lo único que lleva dentro es un condensador.
Pero resulta que a los usuarios de tarifa de particulares se nos cobra solo por la potencia activa (los kW), por lo que al enchufar este aparato a la red solo le estamos produciendo ahorros a la compañía eléctrica. A nosotros no nos afecta en absoluto. Así que si quieres ahorrar, no te molestes en comprar estos aparatos. Habrás ahorrado 40 euros.
Fuente: LA MENTIRA ESTÁ AHÍ FUERA