Caso sucedido en urgencias en uno de esos hospitales perdidos de Andalucía, y le llegó un señor adulto, tampoco muy mayor, muy compungido. Le picaban mucho los genitales, pobre hombre, y creía que había cogido una enfermedad “de esas que se te cae el rabo”, y que el médico interpretó como enfermedades venéreas.
Mientras rellenaba unos formularios para hacerle varios análisis, le preguntó dónde pensaba que había adquirido la supuesta enfermedad. Para sorpresa de mi amigo, el buen señor no había mantenido relaciones sexuales sin protección, y aún más increíble, tampoco con protección.
Al interrogarle sobre qué le hacía pensar que había contraído una enfermedad venérea, obtuvo la siguiente respuesta:
“Es que me hice un zambombazo con una película de esas guarrajas que te ves en el oldenaró, y me da a mí que me ha pegao un viru de esos.”
Fuente: Gades Noctem