La Sociedad Española de EndocrinologÃa y Nutrición (SEEN) y la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) recuerda a los ciudadanos la importancia de cuidar la alimentación durante las fiestas navideñas y tener en cuenta las calorÃas que se consumen ya que, por ejemplo, una porción del tradicional roscón de Reyes aporta más calorÃas (Una calorÃa equivale exactamente a 4,1868 julios) que diez gambas a la plancha (250 frente a 200)
Asà lo aseguran en un documento presentado recientemente con motivo de la campaña Disfruta de la Navidad sin aumentar de peso. Come sano y cuida tu cintura, en el que animan a los ciudadanos a modificar los menús navideños a fin de hacerlos «más saludables».
De este modo, recuerdan que el roscón es el dulce tÃpico de estas fiestas que más calorÃas tiene, frente a las 200 que aporta un dedo de turrón, las 120 de un polvorón o las 80 de un mazapán.
Igualmente, sobre las bebidas más habituales en estas fechas, advierten de que tomarse un pacharán (240 calorÃas) es similar en términos calóricos que tomarse tres copas de cava (70 cada una) o hasta cinco copas de vino blanco (50 calorÃas cada una).
Alternativas
Por ello, y con la intención de hacer «menos calóricos» los menús navideños, proponen algunas alternativas como sustituir los canapés por un plato de verdura, poner pescado al horno como plato principal y optar por fruta natural en lugar de escarchada a la hora del postre.
Además, si al comer tres langostinos se prescinde de la mahonesa, la aportación calórica se reduce en 90 calorÃas, mientras que en el caso del plato principal, una lubina a la sal tiene la mitad de calorÃas que el tradicional pavo relleno (206 frente a 516), aunque se coma la misma cantidad.
Según destacó el presidente de la SEEN, Tomás Lucas, durante la presentación de esta campaña, en España está aumentando en los últimos años la incidencia del sobrepeso y la obesidad, en parte porque los ciudadanos se han «apartado de la dieta mediterránea», insistiendo en el «serio problema» que supone ante las diversas enfermedades asociadas, tanto cardiovasculares como respiratorias e incluso cáncer.
De este modo, y ante los excesos alimenticios que se producen durante las fiestas navideñas, SEEN y SEEDO abogan por cambiar lo menos posible los hábitos de alimentación, mantener una regularidad horaria para las comida y practicar 30 minutos de ejercicio fÃsico diario, ya que asà se puede «compensar las calorÃas extras de las comidas navideñas».
También insisten en «no dejar de tomar fruta», evitar los picoteos y las salsas industriales, sustituyéndolas por otras caseras a base de hortalizas, hierbas aromáticas, yogures desnatados o vinagrtas.
Fuente: Público.es