Idea del estudio Rosenbaum (Brasil), en casas en las afueras de San Pablo, montando este sorprendente jardín vertical hecho con reciclado de botellas de plástico tipo PET.
Buena como idea pero también ha ayudado a alegrar la vida sus habitantes que en algunos casos disponen de una sola habitación para vivir y una renta de 130 dólares al mes.
Se plantaron hortalizas y verduras que luego los moradores de casa casa se encargarán de recolectar y sembrar, la instalación solo sirve para pequeñas plantas.
Su estructura es bastante sencilla de llevar a cabo, es pura imaginación y ganas de dar valor a cosas sencillas. Una buena opción para lugares en los cuales el espacio es reducido, un buen pasatiempo, y una muy pequeña forma de sumar reciclando lo que terminaría en los vertederos sanitarios.
Fuente: Soluciones Especiales