1. Cómprese en el supermercado una botella ordinaria de agua Vichy Catalán (botella de la izquierda)
2. Sustitúyase cuidadosamente la etiqueta original por otra, convenientemente retocada ad hoc, y colocada en el mismo sitio que la original (botella de la derecha).
(Botella trucada. Pinchar aquí para agrandar)
3. Vuelva a dejarse la botella en la estantería del supermercado.
4. Saque usted la cámara de fotos, o mejor, de vídeo, y si se lo permite la risa, proceda a filmar a cuanto botarate se crea la leyenda de la botella trucada y esté dispuesto a pasar por caja a comprar tamaño bálsamo vivífico.
Fuente: Existen los fantasmas
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