Algunos alcoholismos crónicos o sociales suelen pasar desapercibidos. Hasta las monjitas -incluso de clausura- llegaban a tener cirrosis hepática por el consumo de la famosa «Agua del Carmen» (licor de alta graduación tradicionalmente usado como remedio popular por su efecto calmante, antiespasmódico y antihistérico (excitación emocional).
La receta es del año 1611 y proviene de los Monjes Carmelitas. Tiene los siguientes ingredientes:
1 litro de alcohol de 80º,
1/2 litro de agua,
200 g. de hojas de melisa,
40 g de corteza de limón,
10 g de semillas de coriandro,
10 g de nuez moscada,
10 g de clavo de olor,
10 g de raíz de angélica.
Se mezcla en una botella de vidrio hermética y se deja macerar durante 20 días). Un bombazo.
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