Greenpeace empezó una campaña de difamación contra Syngenta, recurriendo, cómo no, a mentiras:
Activistas de Greenpeace escalaron la fachada de la sede de Sygenta en Basilea (Suiza) para protestar contra los pesticidas que afectan a la salud de las abejas y fomentan el declive de las colonias.
Los activistas desplegaron una pancarta, exigiendo una prohibición en el uso de estos productos, en la que se podía leer «Los plaguicidas Syngenta matan a las abejas».
«Para luchar contra la pérdida de estos insectos esenciales para la polinización, es urgente prohibir totalmente los pesticidas daañinos para ellos, especialmente tiametoxam», según informó en un comunicado Greenpeace.
Todo eso suena muy bonito y tales, salvo porque –sorpresa, sorpresa– no hay evidencia de que los pesticidas realmente afecten la salud de las abejas.
Fuente: DE AVANZADA