La quinina o chinchona, es un alcaloide natural, blanco y cristalino, que presenta un sabor muy amargo. La quinina era el principal compuesto empleado en el tratamiento de la malaria hasta que fue sustituido por otros medicamentos sintéticos más eficaces, como la quinacrina, cloroquina y primaquina.
Haciendo un poco de historia…durante cientos de años la Quinina se obtenía de la corteza del árbol de la quina originario del Perú y utilizado desde antes del Imperio de los Incas para combatir los estados febriles. Los antiguos peruanos la utilizaron en su forma natural restregando o cubriendo las heridas con la corteza del tronco de la quina molida. En el Siglo XV, los españoles llevaron a Europa “la maravilla que curaba todas las enfermedades” y se utilizó desde entonces en ese continente, aunque en el Perú se empleaba ya desde hace miles de años. En 1820, fue descubierto un método para extraer la quinina y la cinchonida que era otra droga proporcionada por el árbol. Desde ese año, se comenzaron a utilizar esas drogas en vez de la corteza propiamente dicha, tal cual se había estado haciendo desde tiempos inmemorables. Actualmente se sigue utilizando para combatir la malaria, también en contra de los calambres musculares como sulfato de quinina (Circonyl de Pharma) y hasta en cosmetología.
1724 Tonic Water es la primera tónica premium elaborada con quinina natural auténtica, recolectada a mano en uno de los antiguos Caminos del Inca (Perú) -donde los conquistadores españoles la descubrieron por primera vez-.