Una investigación desarrollada por la Universidad Deakin (Australia), asegura que la cafeína de los refrescos no altera su sabor pero si aumenta el consumo de este tipo de bebidas por su poder adictivo. Por lo tanto, piden a las autoridades que pongan en marcha una regulación más estricta sobre el uso de este aditivo en las bebidas.
El estudio publicado en el British Journal of Nutrition describe como a través de pruebas con 99 personas se confirmó la hipótesis. La muestra se dividió en dos grupos uno de los cuales consumía una bebida azucaradas con limón y cafeína y el otro sin la cafeína. Los participantes debían simplemente decir qué sabor era más agradable.
La investigación duró un mes, durante ese tiempo los participantes podrían beber tanto producto como quisieran. La cantidad consumida por cada persona fue registrada día a día. También se evaluó el disfrute de la bebida al principio y al final de la investigación.
Los resultados obtenidos muestran que el grupo que tomó la limonada con cafeína bebieron una media de 419 ml diarios. En cambio, en el grupo que estuvo tomando la limonada sin cafeína los datos obtenidos fueron menores, el consumo medio se cifró en 273 ml diarios. Según estos resultados, se considera que claramente la cafeína introducida en los refrescos como aditivo, provoca un aumento del consumo de la bebida y por tanto se aporta mayor cantidad de kilocalorías al organismo.
Algunos fabricantes de refrescos afirman que la cafeína se añade solo como un potenciador del sabor sin embargo esta afirmación es cuestionada por esta investigación.
Fuente: ClubDarwin.NET